Hoy me gustaría hablar un poco sobre el marketing de guerrilla y concretamente de marketing offline, es decir, aquél que no utiliza internet para nada.
Presupuestos reducidos y una imperiosa necesidad de invertir cada euro que destinamos al marketing de la manera más inteligente. Estas son las premisas más comunes en las pequeñas y medianas empresas.
Pero déjame decirte una cosa, un presupuesto reducido no significa ineficaz, simplemente tienes que ser muy específico, memorable, enérgico, inusual, creativo y tener muchas ganas de hacer algo diferente.
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Ser específico
Yo creo que lo más importante es asegurarse de que te estás enfocando en tus clientes potenciales. Por ejemplo, si tienes un taller de reparación de automóviles, es fácil pensar que tendrás bastantes clientes ya que la mayoría de las personas tienen coche hoy en día. Sin embargo, asegúrate de que te estás dirigiendo al tipo de personas que tienen coches que tú sabes reparar bien, o a una determinada marca o modelo o incluso a una gama de coches de lujo (donde seguramente los dueños tengan bastante dinero para gastarse).
Si apuntas a cualquier cosa, cualquier cosa te pagarán por ello. Se específico, concéntrate en un nicho específico dentro de tu campo. Un ejemplo de nicho siguiendo el ejemplo del taller de coches, podría ser un “Taller de reparación de coches clásicos”, o “Taller de preparación de coches para carreras en circuitos”.
Ser memorable
Debes contar con un producto o servicio (o si no lo tienes créalo) que puedas explicar rápidamente y con pocas palabras. Te pongo unos cuantos ejemplos: “Maquillaje para novias”, “Ropa para bebés”, “Desayunos a domicilio”, etc. Observa como el nombre lo explica todo, no da lugar a dudas sobre de qué trata ese servicio o producto.
La idea es tratar de ofrecer algo que sea atractivo y útil para las personas y que nadie más ofrezca. Resulta mucho más fácil vender un servicio o producto en particular si contamos con un presupuesto reducido para marketing, que tratar de vender todos nuestros productos o servicios. De esta forma, estaremos ahorrando dinero y enfocándonos en un nicho de mercado en particular.
Otra técnica fácil y barata es identificar a tu empresa con una buena marca o frase que se quede en la cabeza, que sea pegadiza. Por ejemplo, si tenemos un negocio de fontanería podríamos utilizar “Fontanería Juan: El hombre de la llave inglesa” junto con un dibujo de un fontanero con esa llave inglesa, rápidamente la gente relacionaría ese slogan con los servicios de fontanería.
Ser enérgico
Imprime algunos flyers (folletos), aproximadamente del tamaño de un libro de bolsillo (es el tamaño que mejor suele funcionar). Asegúrate de que tu oferta queda bien explicada y resulta fácil de leer. Añade algunos gráficos y no te enrolles con demasiado texto. No te olvides de poner un teléfono de contacto, dirección, página web y por supuesto el nombre de la empresa.
Bueno, así que tenemos identificados a nuestros clientes potenciales y qué es lo que les queremos vender, ahora lo que necesitamos es acercarnos de alguna manera a estas personas. Aquí te dejo unas cuantas ideas para que pruebes:
Parkings. Pega tu folleto en las máquinas de pago de los parkings.
Cines, restaurantes, etc. Ralmente útil si te diriges a un público joven. Cuelga tus folletos en los tablones de anuncios, cerca de las taquillas del cine o en cualquier sitio donde sepas que la gente tiene que esperar (si se trata de algún restaurante tipo take away, colócalo cerca de donde la gente espera para recoger su comida).
Bares, pubs, gimnasios: Coloca tus flyers donde puedan ser vistos por la gente que se reuna en estos lugares.
Servicios complementarios: como concesionarios de coches, peluqerías, etc. cualquier sitio que ofrezca un servicio que le pueda interesar a tus potenciales clientes. También puedes intercambiar folletos con los dueños de estos negocios para publicitaros mutuamente.
Como no sois competencia directa, ambos os complementais perfectamente. Por ejemplo, si tienes una empresa de organización de bodas, puedes ir a una floristería a dejar tus folletos, ya que es algo que está relacionado con ambos negocios.
Ser inusual
Si tienes una pizzería, puedes colocar un anuncio en la tapa de la caja de la pizza para llevar.
Diseña posavasos donde aparezcan tus servicios y regálalos a los duelos de los bares. En el texto del anuncio que ponga algo así “Muestra este posavasos en la tienda y te ofrecemos un descuento”.
Envía ofertas dirigidas a empresas locales y al personal que trabaja en ellas. Por ejemplo, descuentos especiales para las trabajadoras de la Peluquería Rizos.
Imanes para la nevera, siempre hay alguien que los colecciona y normalmente se pegan en la puerta de la nevera; un sitio bastante frecuentado en cualquier casa.
La gente siempre está pegando cosas es sus monitores, o tienen pequeños muñecos en el escritorio. Una idea puede ser un bloque de post-it con tu número y principal servicio en el pie de cada uno o un pequeño juguete o una bola de goma para desestresarse que contenga tu publicidad.
Ser creativo
Truco: Envía los detalles de tu nuevo servicio a la prensa local y a las emisoras locales de radio, en forma de un comunicado de prensa.
Para ser más eficaz, piensa un poco y crea algo raro o estrafalario. Una pizzería de EEUU apareció en todos los noticiarios a nivel nacional porque había creado una pizza con caviar que costaba 200 dólares. Si es algo original, con un poco de suerte los medios comentarán tu información, dándote publicidad gratis.
Por último, intenta pensar un poco de forma diferente (outside the box que dicen los americanos). La clave es diferenciarse de la competencia.