La perspectiva de avanzar a la cima de su campo de trabajo es lo que hace posible que muchas personas sigan trabajando, perfeccionando sus habilidades y asumiendo nuevos proyectos.
Pero después de cierto punto, el desarrollo profesional depende de algo más que habilidades técnicas y la voluntad de trabajar duro. Puedes incluso estudiar un Ciclo Superior en Asistencia a la Dirección, pero también necesitas algunas habilidades sociales, una de las cuales es la capacidad de asumir un papel de liderazgo.
Algunas personas son líderes naturales, pero cualquiera puede desarrollar el conjunto de habilidades necesarias con algo de práctica. Si quieres llevar tu carrera lo más lejos posible, debes estar dispuesto a esforzarte.
Hoy te traigo hay 9 estrategias para ayudarte a desarrollar tus habilidades de liderazgo y seguir avanzando en tu carrera.
Tabla de contenidos
Practica la disciplina
Un buen líder necesita disciplina. Desarrollar la disciplina en tu vida profesional (y personal) es imprescindible para ser un líder eficaz y para inspirar a otros a ser disciplinados también. La gente juzgará tu capacidad para liderar por la cantidad de disciplina que demuestres en el trabajo.
Demuestras disciplina en el trabajo cumpliendo siempre los plazos, cumpliendo con las citas y finalizando las reuniones a tiempo.
Si eres desorganizado por naturaleza, es posible que tengas mucho trabajo por delante, pero siempre puedes comenzar poco a poco: intenta implementar buenos hábitos en casa, como levantarte temprano y hacer ejercicio diario, y avanzar a partir de ahí.
Acepta más proyectos
Una excelente manera de desarrollar tus habilidades de liderazgo es asumir más responsabilidades. No tienes que asumir más de lo que puedes manejar, pero debes hacer más que simplemente lo que está escrito en la descripción de tu trabajo si deseas realmente crecer.
Salir de su zona de confort es la única forma en la que aprenderás algo nuevo y, al hacerlo, los mandos superiores te verán como alguien que toma la iniciativa.
Aprender a seguir
Un verdadero líder no tiene ningún problema en ceder el control a otra persona cuando sea apropiado. No debes sentirte amenazado cuando alguien no está de acuerdo contigo, cuestiona tu forma de pensar o presenta sus propias ideas.
Mantén una mente abierta y reconoce a los demás cuando lo merezcan. No siempre será fácil, pero si aprendes a valorar y respetar a los demás en tu equipo, será más probable que se pongan al frente por ti.
Desarrolla un sexto sentido
Una marca de un buen líder es alguien que puede ver el panorama general y anticipar los problemas antes de que ocurran. Esta es una habilidad valiosa que se debe tener cuando se manejan proyectos complejos con plazos ajustados.
La capacidad de prever y proporcionar sugerencias para evitar problemas potenciales es algo de valor incalculable para un líder. Esta habilidad también ayuda a reconocer oportunidades que otros pasan por alto, lo que sin duda te hará ganar reconocimiento.
Inspira a los demás
Ser líder significa que eres parte de un equipo y, como líder, debes poder motivar e inspirar a las personas con las que trabajas para que colaboren lo mejor que puedan.
Cuando un miembro del equipo necesite aliento u orientación, ofréceselo. A veces, todo lo que una persona necesita es alguien que lo escuche y sea comprensivo.
Sigue aprendiendo
El mejor camino para convertirte en un buen líder es seguir aprendiendo cosas nuevas. Mantiene tu mente despierta y tus habilidades frescas. Te prepara para los nuevos desafíos que pueden surgir en el camino, lo que siempre es bueno en un líder.
Empodera a tus compañeros de equipo
Nadie es el mejor en todo, y cuanto antes te des cuenta de eso, antes podrás aprender a ser un buen líder. Delegar tareas a otros no solo te libera para las cosas que haces bien, sino que también empodera a otras personas de tu equipo.
Resuelve conflictos
¡No seas un jefe del infierno! No todo el mundo se lleva bien todo el tiempo. En lugar de ignorar los conflictos interpersonales, con la esperanza de que desaparezcan, abórdalos hablando con los involucrados en privado.
Además, estate abierto a reasignar miembros del equipo si el conflicto no se puede resolver.
Se un oyente perspicaz
Convertirse en líder no significa que siempre tengas que estar en el centro de atención. Un rasgo importante de un buen líder es alguien que escucha las sugerencias, ideas y comentarios de otras personas y se basa en ellos.
Los buenos oyentes saben que la comunicación no se trata solo de palabras, sino de captar señales no verbales, como el contacto visual y el lenguaje corporal.
Las buenas habilidades de liderazgo son esenciales para avanzar en tu carrera, pero como puedes ver, el liderazgo es mucho más que simplemente ser el que manda. Como dijo el estadista estadounidense John Quincy Adams, «Si tus acciones inspiran a otros a soñar más, aprender más, hacer más y ser más, eres un líder».