El SEO está ya boca de todos.
No solo de los marketers online, sino también de todos los que tienen un pequeño negocio y una humilde página web.
Por ello, es fundamental que conozcas qué es exactamente y cuáles son algunos conceptos básicos sobre el tema.
Por supuesto, este artículo no pretende ser un manual, pues el tema da para un curso entero, pero sí servirá como una introducción básica sobre su importancia.
Tabla de contenidos
Qué es el SEO
SEO son en realidad las siglas de Search Engine Optimization, es decir, Optimización para Motores de Búsqueda.
Hace referencia a la disciplina que trata sobre las técnicas que modifican el contenido y la estructura de páginas web para situarlas en el mejor puesto posible de las listas de resultados de los buscadores, principalmente en Google.
En este punto, conviene hacer una diferenciación entre SEO y SEM: esta última significa Search Engine Marketing, es decir, el Marketing en los Motores de Búsqueda.
Trata sobre todas las acciones de marketing relacionadas con motores de búsqueda, incluyendo aquellas que se realizan directamente en los motores de búsqueda, como es el Pay Per Click (anuncios que se insertan en los listados a cambio de una contraprestación económica al buscador por cada click que se hace sobre el anuncio).
Por tanto, el SEO se encuadra dentro del SEM.
Entendido esto, es el momento de comprender la importancia de los motores de búsqueda para el tráfico de una página web.
Cada sitio es diferente, pero se calcula que entorno a tres cuartas partes de los visitantes que llegan a una página lo hacen a través de Google y buscadores similares.
Y en ocasiones, más de ese 75%.
También cabe mencionar el concepto de ranking: es la valoración que el buscador tiene de una página.
Cuanta mayor sea dicha valoración o puntuación, más posibilidades tendrá de auparse a los primeros puestos de las listas de resultados.
Normalmente se suele expresar en una calificación de 1 a 10, algo que en el caso de Google en un principio se llamó Page Rank y que este motor de búsqueda calcula en base a diferentes parámetros, siendo uno de los principales el número de enlaces de Internet que ‘apuntan’ a esa página.
A día de hoy, Google ya no actualiza el Page Rank de las páginas (por lo menos de forma pública) y se utilizan otras métricas como el Domain Authority (DA), Page Authority (PA), Trust Flow (TF) o Citation Flow (CF).
Traduciéndolo a un lenguaje más coloquial, se puede decir que si Google observa que muchas páginas enlazan a una página concreta, esta tiene gran relevancia y, por tanto, merece ser destacada en las listas de resultados.
Por todo ello, estar bien posicionado en esas listas de resultados de los buscadores (cuanto más alto, mejor) garantiza más tráfico y, a fin de cuentas, más clientes potenciales.
Dado que todo lo relativo al SEO cambia con bastante velocidad y aparecen y desaparecen métricas, técnicas y estrategias, lo más recomendable es irse actualizando mediante cursos SEO online.
Cómo aplicar el SEO
Dentro del SEO existen numerosas técnicas para que una determinada página web escale hasta un buen puesto en esas listas de resultados, también llamadas SERPs.
Lógicamente, el mejor puesto es el primero, el que mayor visibilidad tiene y más clicks recibe, aunque es vital estar al menos entre los 10 primeros resultados, es decir, en la primera página que muestra el buscador, pues está demostrado que pocos usuarios van hasta la segunda página para seguir con su rastreo.
Estas técnicas se dividen principalmente en dos grupos: SEO On Page y SEO Off Page.
Veámoslas.
SEO On Page
Hace referencia a las técnicas SEO que se realizan en la propia página web.
Es decir, en su contenido o en su estructura. La variedad de acciones es muy amplia y las principales son:
- Utilizar palabras clave en los textos de la página, en el nombre de los archivos subidos a la web (fotografías, documentos PDF, etc.), en el código de la página (títulos, encabezados, etc.). Son las llamadas keywords y se corresponden con los términos que utilizaría un usuario de Internet para encontrar dicha página en la Red. Por ejemplo, si se trata de un sitio web de venta de calzado, una keyword podría ser ‘comprar zapatos online’.
- Mejorar la velocidad de carga: es decir, el tiempo que tarda dicha página en cargarse en el dispositivo del usuario. Se logra, entre otras cosas, reduciendo su peso en MB. Cuanto menos pese esa página, menos tardará en cargarse. Y eso lo premian los buscadores, por lo que a mayor velocidad, mejor valoración por parte del buscador
- Reparar errores de código: cuanto más clara sea la estructura de la web y menos errores de código tenga, también será vista con mejores ojos por parte de los motores de búsqueda online.
- Contenido responsive: la eclosión de los dispositivos móviles ha hecho que los motores de búsqueda premien a aquellas páginas que tengan un diseño adaptado a dispositivos móviles. Al menos, en aquellas búsquedas que se realizan desde los mencionados dispositivos móviles
- Crear un blog y actualizar periódicamente el contenido del sitio web para que el buscador detecte que es un sitio en constante actualización, lo opuesto a antiguo y estático
SEO Off Page
Hace referencia a las técnicas que se llevan a cabo fuera de la página web, es decir, en otras páginas web.
La misión principal es conseguir que esas otras páginas enlacen a la landing page (página de aterrizaje) en la que también se han llevado a cabo acciones de SEO On Page.
De esta manera, cuanto más enlaces externos reciba, más Page Rank conseguirá. Algunas medidas que se pueden llevar a cabo para ello son:
- Dotar de contenido a la página web y que éste sea compartido en redes sociales, viralizándose. Por ejemplo, mediante la creación de artículos de blog
- Dar de alta la página en directorios, como listados de empresas, listas de recursos, etc.
- Crear un canal de YouTube con tarjetas en cada vídeo, en las cuales se inserte un enlace entrante a la web
Los límites del SEO: el Black Hat
Pero no todo es tan fácil: en las primeras fases del SEO, hace unos años, surgió la tentación de ‘engañar’ a los buscadores.
Por ejemplo, con programas automáticos que generaban grandes cantidades de enlaces entrantes a páginas web para que éstas ganaran Page Rank artificialmente.
También se abusó de las keyword, inundando el contenido de una página hasta hacerlo farragoso y poco amigable con tal de que se insertaran todas las palabras claves posibles.
Y como estos, otros muchos ejemplos.
Es lo que se llama Black Hat, y actualmente está totalmente desaconsejado.
En cambio, ahora se imponen una serie de buenas prácticas que llevan a un posicionamiento natural de la página.
Por ejemplo, mediante el link baiting: la estrategia de crear contenido de verdadera calidad en el blog empresarial o en el canal de YouTube, por ejemplo, de tal modo que dicho contenido se ‘viraliza’ solo.
Piezas de verdadero interés y muy prácticas para sus lectores o espectadores, a quienes se les aportan consejos o tutoriales sobre determinadas materias.
También es una buena práctica la repetición mesurada de palabras clave, tratando de no sobrepasar el 1% del contenido total.
En realidad, muchas son las técnicas, los trucos y los factores que entran en juego en el SEO.
Dominarlos para aplicarlos en tu propia página web te ayudará a dar un salto en el número de visitantes, que se traducirá en un aumento de las peticiones de información, encargos o compras.
Y lo mejor de todo es que esos avances se pueden medir mediante herramientas como Google Analytics, analizando casi en tiempo real qué actuaciones están teniendo resultados positivos y cuáles no.
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