Los 9 mayores errores de marketing que puedes cometer (y cómo evitarlos)

Voy a empezar por lo obvio (aunque para muchos no lo sea): el marketing es una inversión para tu negocio.

Crear un plan de marketing e implementarlo puede ayudarte a obtener una mayor visibilidad y mejorar los números de tu negocio.

Lo que sucede es que muchas veces también cometemos errores que torpedean nuestros avances. En este artículo te voy a explicar cuales son los 10 mayores errores de marketing que puedes cometer:

1. No prestar atención a los detalles

Hay un refrán en inglés que dice “The devil is in the detail”, que viene a decir qué al final lo que cuentan son los pequeños detalles.

Tony Robbins dice que la diferencia entre lo ordinario y lo extraordinario únicamente se encuentra a 1 milímetro de distancia.

Ten en cuenta que la imagen que tienen los demás de tu negocio va íntimamente ligada a la imagen que tu mismo proyectas. Da igual si estás en internet o no, los detalles cuentan. Por ejemplo no prestar atención a faltas de ortografía en tus materiales de marketing, lo que hace es mandar un mensaje negativo.

Si a ti no te importa el hecho de proyectar la mejor imagen que puedas lograr de tu negocio, ¿qué esperas que piensen tus clientes sobre los servicios o productos que ofreces? Por lo tanto, presta mucha atención a los detalles, ya que a lo mejor estás perdiendo ventas por esa razón.

2. No entender las necesidades de tus clientes

¿Sabes realmente lo que tus clientes potenciales buscan? ¿Entiendes cuales son sus necesidades? ¿Puedes explicar claramente por qué eres tu o tu empresa la solución a sus problemas?

Es importante que antes de elaborar tu plan de marketing, te tomes un tiempo para definir cual es tu cliente ideal, cuales son sus necesidades y qué es lo que le puedes ofrecer mejor que nadie para destacar entre la competencia.

Cuanto más conozcas acerca de tus clientes, mejor y más efectivo resultará tu marketing. Una forma de empezar es diseccionar a tus mejores clientes para averiguar por qué te eligieron a ti y qué es lo que marca la diferencia respecto a tus competidores.

3. No mantenerte fiel a la imagen de tu marca

La imagen de tu marca se podría decir que es como la promesa que le haces a tus clientes. La gente tiene una habilidad increíble para detectar cuando una marca y sus mensajes no coinciden.

Si tus acciones de marketing van por un sitio diferente a lo que es tu imagen de marca y tu reputación, corres el riesgo de confundir e incluso enfadar a tus clientes. Así que asegúrate de que tu marketing se mantiene fiel a tu imagen de marca y a lo que prometes.

4. No realizar email marketing de forma correcta

¿Cuantas newsltters a las que tu no te has dado de alta recibes cada semana? Yo cuando recibo email de empresas que ni conozco, se que seguramente hayan metido mis datos de forma manual o peor aun, que hayan comprado alguna base de datos para bombardearme con publicidad.

Lo peor que puedes hacer es enviar correos no solicitados a la gente. Da igual si conociste a alguien en un congreso y crees que le puede interesar. Busca otras formas de llegar a la gente y que sean ellos mismos los que se den de alta.

Lo importante es tener una base de datos de calidad y realizar acciones de email marketing efectivas, no tener miles de contactos a los que no les interesas lo más mínimo y acribillarles con ofertas y ventas.

5. Pensar que algún experto en SEO te va a hacer millonario

Lo he dicho varias veces, pero te lo volveré a decir: no existen recetas mágicas ni atajos. Nadie, ningún experto, ni ningún gurú del SEO puede garantizarte la primera posición en Google (y menos aún por 50 o 100€ al mes). Si algo parece demasiado bonito para ser verdad, seguramente sea así.

Existen muchos que te querrán vender la moto, pero lo cierto es que posicionar una página web es algo que requiere una buena inversión en tiempo y en dinero. No hay más.

Lo que yo te recomiendo es que te centres en crear una estrategia de marketing de contenidos y seas constante. De este modo, poco a poco verás como vas logrando resultados.

6. Utilizar el nombre de tu empresa o no poner una foto real en tus perfiles de redes sociales

La gente quiere conectar con otra gente, no con empresas. Todos queremos ver quién está detrás de esa empresa, de ese perfil, de ese blog. Es la curiosidad humana. A no ser que seas nike, cocacola o apple, el nombre de tu empresa no dice demasiado.

En cambio si hablas de cara, con tu nombre, poniendo tu foto en tus perfiles y sin esconderte, eso es lo que la gente busca y ayuda a generar confianza con tus clientes potenciales.

Por otro lado, en la mayoría de redes sociales como facebook o google+, no está permitido crear perfiles personales con datos de empresa. Pero eso realmente es lo de menos, para mi, la razón principal de ser de las redes sociales es conectar con otras personas. Por lo tanto, habla todo lo que quieras de tu empresa, pero que la gente sepa quien eres. Si tienen preguntas, respóndelas y trata de ayudar.

7. No prestar atención a tu reputación online

Hoy en día la gente habla y expresa su opinión acerca de prácticamente todo. Si tienes un negocio cara al público, es muy probable que tus clientes escriban opiniones acerca de su experiencia.

Lo más típico son reseñas de restaurantes, hoteles, etc, pero te aseguro que en foros, grupos de discusión, redes sociales, etc. hay mucha gente hablando (bien o mal) sobre empresas y profesionales. Si no prestas atención a lo que dicen de ti, es posible que tu negocio se vaya a pique y tu no te des ni cuenta.

Puedes utilizar servicios como los de Google Alerts para estar un poco al loro.

8. Querer hacer demasiadas cosas a la vez

Seguramente te encantaría tener una presencia activa en todas las redes sociales posibles, para así llegar a más gente. Pero lo cierto es que todos disponemos de unos recursos limitados.

Por lo tanto, abrirte un perfil en todas las redes sociales que encuentres puede que no sea la mejor idea e incluso puede llegar a ser contraproducente. La razón es que para tu presencia en una red social sea efectiva, tienes que poder estar atento y activo. Si no respondes a las preguntas de tus seguidores o no publicas nada nunca, no te servirá de nada estar una red social.

Es algo que veo constantemente, perfiles en facebook o twitter donde el dueño de la empresa empezó con muchas ganas hace años y al cabo de poco tiempo lo dejó abandonado por falta de tiempo o ganas.

Por lo tanto, primero selecciona las redes en las que quieres tener presencia, céntrate en ellas y olvídate de las demás. Lo importante es conectar con tus clientes.

9. Creer que el marketing es un gasto y no una inversión

Si tienes la típica mentalidad de que todo lo relacionado con el marketing es un gasto, te aseguro de que no vas por buen camino. El marketing es un proceso que requiere tiempo, constancia y paciencia para lograr mejorar la visibilidad de tu negocio.

Si eres de esos que van de flor en flor probando cosas y al poco tiempo lo dejan “porque es un gasto”, te puedo asegurar que nunca lograrás resultados. Traza un plan de acción, síguelo de forma constante y espera a ver resultados. ¡Roma no se hizo en un día!